Su proceso inicia con una excelente selección de animales en cuanto a parámetros de alimentación, raza, edad, peso en pie, condiciones sanitarias y de bienestar animal, los cuales son factores determinantes en la producción de carnes con altos atributos de calidad (sabor, terneza, marmoleo y jugosidad).
Posteriormente los animales son faenados y despostados con procesos estandarizados y certificados; los cortes son empacados al vacío en bolsas de polietileno de alta densidad y sometidos a un proceso de termoencogido o termoformado, que garantiza mayor vida útil y conservación.




































